No juzguéis.

Lucas 6:37-38.

 

Introducción.-

 

Juzgar a los demás, teniendo o no la información suficiente, siempre será un error.

 

Todos hemos caído alguna vez en la terrible trampa de juzgar a los demás.

Cada vez que emitimos un juicio sobre alguien nos convertimos en personas que crean una o varias historias que pueden ser muy lejanas a la realidad sobre las que las hemos inventado.

Ejemplo:

Piensa en esa madre que siempre lleva tarde a su hijo al colegio. Quizás empieces a juzgarla como una mala progenitora o una vaga a la que le gusta mucho la cama. Incluso como una desordenada que no sabe controlar el caos.

¿Te has parado a pensar en si todo esto es verdad?

Las personas son rápidas para juzgar a los demás, pero lentas para corregirse a sí mismas

De allí que Jesús dijo:

  • Lucas 6:41-42  ¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?  ¿O cómo puedes decir a tu hermano: Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo, no mirando tú la viga que está en el ojo tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.

 

Jesús utiliza la comparación de la viga y de la paja para fustigar la conducta de los fariseos, propicios para descubrir los pequeños defectos (paja) en los demás y no reconocen los propios, que son mucho mayores (viga) (Mt 7,3-5; Lc 6,41-42).

 

Sin darte cuenta, estás suponiendo ( presumir, sospechar; lo que puede estar pasando en la vida de esa persona.

Estás cayendo en la trampa de completar la información que desconoces con una historia inventada por ti… “De allí que el cerebro completa lo que los ojos ven.”

 

Porque juzgamos:

La razón por la que juzgamos de esta manera tan precipitada la tiene nuestro propio ego.

De forma consciente o inconsciente, necesitamos sentirnos mejores que los demás o manifestar nuestro rechazo ante una determinada actitud.

Necesitamos notarnos superiores, especiales, distintos, esto alimenta nuestro ego y, de alguna forma, hace que nos sintamos mejor con nosotros mismos.

 

Juzgar a una persona no define quién es ella, define quién eres tú.

 

Que es juzgar.-

·         Deliberar [un juez, un tribunal o quien tiene autoridad para el caso] acerca de un asunto o de las acciones de una persona y emitir sentencia o dictamen sobre ello.

·         Formar un juicio o una opinión sobre una persona o una cosa.

 

UN ACTO ATRIBUIDO A DIOS-.1777

 

La primera vez que aparece la palabra juzgar; hace referencia a Dios y utiliza la palabra dun: gobernar e implica juzgar como árbitro, esforzarse (como la ley, castigar, condenar, defender (causa

 

  •        Génesis 15:13-14  Entonces Jehová dijo a Abram: Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años. Mas también a la nación a la cual servirán, juzgaré yo; y después de esto saldrán con gran riqueza.
  •          Génesis 30:6  Dijo entonces Raquel: Me juzgó Dios, y también oyó mi voz, y me dio un hijo. Por tanto llamó su nombre Dan.
  •         1Samuel 2:10  Delante de Jehová serán quebrantados sus adversarios, Y sobre ellos tronará desde los cielos; Jehová juzgará los confines de la tierra, Dará poder a su Rey,  Y exaltará el poderío de su Ungido.(A)

 

SE PIDE LA INTERVENCIÓN DE DIOS.-8199

 

La palabra Hebreo; Shafat: Juzgar, pronunciar sentencia, (por o contra; implica castigar, por extensión gobernar.

En un caso domestico.-

  •         Génesis 16:5  Entonces Sarai dijo a Abram: Mi afrenta sea sobre ti; yo te di mi sierva por mujer, y viéndose encinta, me mira con desprecio; juzgue Jehová entre tú y yo.

En un pacto entre suegro y yerno.

  •          Génesis 31:53.- El Dios de Abraham y el Dios de Nacor juzgue entre nosotros, el Dios de sus padres. Y Jacob juró por aquel a quien temía Isaac su padre.

 

En el proceso de liberación.-

  •          Éxodo 5:21  les dijeron: Mire Jehová sobre vosotros, y juzgue; pues nos habéis hecho abominables delante de Faraón y de sus siervos, poniéndoles la espada en la mano para que nos maten.

Entre David y Saúl.-

  •          1Samuel 24:11  Y mira, padre mío, mira la orilla de tu manto en mi mano; porque yo corté la orilla de tu manto, y no te maté. Conoce, pues, y ve que no hay mal ni traición en mi mano, ni he pecado contra ti; sin embargo, tú andas a caza de mi vida para quitármela.   Juzgue Jehová entre tú y yo, y véngueme de ti Jehová; pero mi mano no será contra ti.

 

David dice que Dios juzgara a las naciones.-

  • Salmos 7:8  Jehová juzgará a los pueblos;  Júzgame, oh Jehová, conforme a mi justicia,  Y conforme a mi integridad.

 

PRERROGATIVA DE UNA AUTORIDAD.-

Moisés actuó en nombre de Dios.

 

  •          Éxodo 18:13  Aconteció que al día siguiente se sentó Moisés a juzgar al pueblo; y el pueblo estuvo delante de Moisés desde la mañana hasta la tarde.
  •          Éxodo 18:16  Cuando tienen asuntos, vienen a mí; y yo juzgo entre el uno y el otro, y declaro las ordenanzas de Dios y sus leyes.

 

Se establece el sistema judicial.-

 

·         Éxodo 18:19-27  Oye ahora mi voz; yo te aconsejaré, y Dios estará contigo. Está tú por el pueblo delante de Dios, y somete tú los asuntos a Dios.

Y enseña a ellos las ordenanzas y las leyes, y muéstrales el camino por donde deben andar, y lo que han de hacer.

Además escoge tú de entre todo el pueblo varones de virtud, temerosos de Dios, varones de verdad, que aborrezcan la avaricia; y ponlos sobre el pueblo por jefes de millares, de centenas, de cincuenta y de diez.

Ellos juzgarán al pueblo en todo tiempo; y todo asunto grave lo traerán a ti, y ellos juzgarán todo asunto pequeño. Así aliviarás la carga de sobre ti, y la llevarán ellos contigo.

Si esto hicieres, y Dios te lo mandare, tú podrás sostenerte, y también todo este pueblo irá en paz a su lugar.

Y oyó Moisés la voz de su suegro, e hizo todo lo que dijo.

Escogió Moisés varones de virtud de entre todo Israel, y los puso por jefes sobre el pueblo, sobre mil, sobre ciento, sobre cincuenta, y sobre diez.

Y juzgaban al pueblo en todo tiempo; el asunto difícil lo traían a Moisés, y ellos juzgaban todo asunto pequeño.

 

·         Éxodo 21:22  Si algunos riñeren, e hirieren a mujer embarazada, y ésta abortare, pero sin haber muerte, serán penados conforme a lo que les impusiere el marido de la mujer y juzgaren los jueces.

 

·         Levítico 19:15  No harás injusticia en el juicio, ni favoreciendo al pobre ni complaciendo al grande; con justicia juzgarás a tu prójimo.

  •       Deuteronomio 1:12-18  ¿Cómo llevaré yo solo vuestras molestias, vuestras cargas y vuestros pleitos? Dadme de entre vosotros, de vuestras tribus, varones sabios y entendidos y expertos, para que yo los ponga por vuestros jefes. Y me respondisteis y dijisteis: Bueno es hacer lo que has dicho. Y tomé a los principales de vuestras tribus, varones sabios y expertos, y los puse por jefes sobre vosotros, jefes de millares, de centenas, de cincuenta y de diez, y gobernadores de vuestras tribus. Y entonces mandé a vuestros jueces, diciendo: Oíd entre vuestros hermanos, y juzgad justamente entre el hombre y su hermano, y el extranjero. No hagáis distinción de persona en el juicio; así al pequeño como al grande oiréis; no tendréis temor de ninguno, porque el juicio es de Dios; y la causa que os fuere difícil, la traeréis a mí, y yo la oiré. Os mandé, pues, en aquel tiempo, todo lo que habíais de hacer.

·        

  • Deuteronomio 25:1-3  Si hubiere pleito entre algunos, y acudieren al tribunal para que los jueces los juzguen, éstos absolverán al justo, y condenarán al culpable. Y si el delincuente mereciere ser azotado, entonces el juez le hará echar en tierra, y le hará azotar en su presencia; según su delito será el número de azotes. Se podrá dar cuarenta azotes, no más; no sea que, si lo hirieren con muchos azotes más que éstos, se sienta tu hermano envilecido delante de tus ojos.

Tenemos el libro de los Jueces que nos da nombres de hombres y mujer que ejercieron la autoridad para juzgar a Israel durante este tiempo de inestabilidad social.

 

 

 

LA BIBLIA LIMITA EL ACTO DE JUZGAR A OTROS.-

 

La palabra griega para juzgar es: krino: distinguir, decidir (mentalmente, judicialmente; e implica, condenar, castigar. Hacer justicia, determinar, juicio.

  •          Mateo 7:1-2.- No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido.

 

Razones:-

 

Nuestro juicio es según la carne.-

  •         Juan 8:15-16  Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie. Y si yo juzgo, mi juicio es verdadero; porque no soy yo solo, sino yo y el que me envió, el Padre.

 

Hay un juicio que se basa en el conocimiento humano o en niveles humanos, y que nunca ve más allá de las apariencias. Ese era el de los escribas y fariseos; y, en último análisis, así son los juicios humanos, porque no podemos ver debajo de la superficie de las cosas.

 

Hay un juicio que se basa en un conocimiento total de los Hechos y de las circunstancias, y ése pertenece sólo a Dios.

 Jesús afirmaba que los juicios que El hacía no eran meramente humanos, sino divinos, porque El era Uno con Dios. Ahí radican tanto un consuelo como una advertencia. Sólo Jesús conoce todos los Hechos. Eso Le hace más misericordioso que nadie; pero también Le permite ver los pecados que están ocultos a los ojos humanos. El juicio de Jesús es perfecto porque lo hace con un conocimiento que sólo tiene Dios.

 

No juzgue porque habrá un día para ello.-

 

Seremos juzgados por la palabra de Jesús.

  •          Juan 12:47-48  Al que oye mis palabras, y no las guarda, yo no le juzgo; porque no he venido a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo. El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.
  •          Hechos 17:30-31  Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.
  •         Apocalipsis 11:17  diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado. Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes,(M) y de destruir a los que destruyen la tierra.
  •          Apocalipsis 20:11-15 Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.(D) Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.

 

Porque no tenemos valor moral para juzgar.

  •          Romanos 2:1 -3.- Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo; porque tú que juzgas haces lo mismo. Mas sabemos que el juicio de Dios contra los que practican tales cosas es según verdad.  ¿Y piensas esto, oh hombre, tú que juzgas a los que tal hacen, y haces lo mismo, que tú escaparás del juicio de Dios?

No podemos juzgar los pecados de otros porque simplemente pecan de manera diferente a nosotros.-

  •          Romanos 2:14-16  Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos, mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos, en el día en que Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi evangelio.

 

No juzgue porque no es SU siervo.-

  •          Romanos 14:1  -4 El que come, no menosprecie al que no come, y el que no come, no juzgue al que come; porque Dios le ha recibido.  ¿Tú quién eres, que juzgas al criado ajeno? Para su propio señor está en pie, o cae; pero estará firme, porque poderoso es el Señor para hacerle estar firme. Uno hace diferencia entre día y día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté plenamente convencido en su propia mente.
  •        Romanos 14:10-13  Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda lengua confesará a Dios. De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí. Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano.

 

No juzguéis nada antes de tiempo.-

  •          1Corintios 4:5  Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.

 

No juzgue porque la ley la dio Dios.-

  •          Santiago 4:11-12  Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. El que murmura del hermano y juzga a su hermano, murmura de la ley y juzga a la ley; pero si tú juzgas a la ley, no eres hacedor de la ley, sino juez.

Uno solo es el dador de la ley, que puede salvar y perder; pero tú, ¿quién eres para que juzgues a otro?

 

El que nadie tiene derecho a juzgarme no me da libertad para hacer lo que quiera como si estuviera en una anarquía.

 

 

  •          1Pedro 1:17-21  Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, y mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios.